El Diwali, también conocido como “el Festival de la Luz”, es la celebración más significativa del año en la India. Dura 5 días, suele ser entre mediados de octubre y mediados de noviembre y normalmente cae 18 días después de Dusshera. Es la entrada al año nuevo en el calendario Hindú y se celebra con mucho entusiasmo en el Norte de la India.
Este festival da comienzo con el día de Dhanteras y en este día es tradición hacer las denominadas compras de Dhanteras. Durante esta celebración la gente estrena ropa así que es este día se compra ropa nueva, dulces, fuegos artificiales, luces y regalos para los más queridos. Además se hace limpieza general en las casas y se hacen cambios en la casa y se pinta para el año entrante. Durante el Diwali se decoran las casas con coloridos Rangolis y se cuelgan motivos festivos típicos.
Dice la leyenda que el Dios Rama y su esposa Sita regresaban a su reino tras derrotar a Ravanna, el rey de los demonios, y los habitantes de la zona pusieron lámparas en todas las ventanas y tejados para guiarlos hasta su hogar. Así nació la tradición de alumbrar el país con luces en estas fechas y desde entonces el Norte de la India resplandece mientras sus habitantes celebran su más deseado festival.
En esta celebración se venera Lakshmi, la Diosa de la fortuna y prosperidad. Al anochecer se abren las puertas y ventanas y se encienden velas para enseñarle el camino al interior de los hogares para que los bendiga y traiga buena suerte y riqueza en el año que entra. Además también se venera al Dios Ganesha.
Con la entrada al año nuevo, se considera que es buen momento para mejorar como persona, estar preparado para nuevos comienzos y perdonar a los enemigos. En este día, literal y espiritualmente, la luz gana la batalla a la oscuridad.
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