Cada año durante septiembre u octubre (dependiendo del calendario lunar hindú), la India se transforma en un escenario de pura magia con la celebración de Dussehra. Este es uno de esos momentos del año en los que se respira la emoción en el aire, los fuegos artificiales iluminan el cielo y las leyendas épicas cobran vida. Si te has preguntado alguna vez cómo es sentir el latido espiritual de la India, te recomiendo que vivas este festival en primera persona.
¿Qué es Dussehra?
Dussehra, también conocido como Vijayadashami, marca el final de los nueve días de Navratri, un periodo donde se venera a la diosa Durga en sus distintas formas. Pero lo que realmente hace vibrar el corazón de este festival es la épica historia detrás: el triunfo del dios Rama sobre el demonio Ravana. Y no es solo una victoria cualquiera. Este es el momento en que el bien, la justicia y la rectitud se imponen sobre el mal, representado por Ravana, el demonio de diez cabezas.
Como apasionada de la cultura india, siempre me impresiona la forma en que esta historia trasciende lo religioso. No importa si eres devoto o no, la lección es universal: cada uno de nosotros puede luchar y vencer sus propias batallas, como lo hizo Rama.
La historia de Rama y Ravana
Todo comienza con el destierro de Rama de 14 años al bosque, junto con su esposa Sita y su hermano Lakshmana, debido a la intriga de una de las esposas del rey Dasharatha, su padre. Durante su exilio, Sita es secuestrada por Ravana, el rey de Lanka, quien se siente cautivado por su belleza y virtudes. Ravana, conocido por sus diez cabezas, es un símbolo de la arrogancia, la codicia y el mal. Tras el secuestro, Sita es llevada a Lanka, donde Ravana intenta en vano ganarse su amor, mientras ella permanece fiel a Rama.
Lo que sigue es una de las más grandes historias de valentía y sacrificio. Rama, con la ayuda de Lakshmana y un ejército de monos liderados por Hanuman, el devoto más fiel de Rama, emprende una travesía épica para rescatar a Sita. Durante el largo viaje, Rama enfrenta numerosas pruebas, pero es su fe, su sentido de la justicia y su inquebrantable amor por Sita lo que lo guía.
Finalmente, llega la gran batalla. En un enfrentamiento épico que dura varios días, Rama se enfrenta a Ravana, quien es conocido por su gran poder, inteligencia y fuerza. Aunque Ravana poseía grandes dones, como la inmortalidad frente a muchos ataques, Rama representa el ideal de la virtud y la rectitud. Con la ayuda de su ejército y su destreza como arquero, Rama finalmente mata a Ravana con una flecha que perfora su corazón, acabando con el reino de terror que este había construido.
El simbolismo de la historia es profundo: Ravana, con sus diez cabezas, representa las diez pasiones o defectos que los humanos deben vencer para alcanzar la rectitud, como el ego, la codicia, la lujuria y la ira. Rama, por otro lado, encarna la verdad, el deber y el sacrificio. Su victoria sobre Ravana es una alegoría de la victoria del bien sobre el mal, un recordatorio de que la justicia, aunque pueda verse desafiada, prevalece al final.
El Ayuno en Dussehra y su Significado
Durante los días previos a Dussehra, especialmente durante el Navratri, muchas personas practican el ayuno como un acto de devoción. Pero este no es solo un ayuno físico; tiene un profundo significado espiritual. El acto de ayunar simboliza la purificación del cuerpo y la mente, un esfuerzo consciente por eliminar las toxinas tanto físicas como mentales. Es una forma de conectarse más profundamente con lo divino y prepararse para el cambio espiritual que viene con el triunfo del bien sobre el mal.
He hablado con muchas personas en India que me han contado cómo el ayuno les da una sensación de claridad, como si estuvieran alineando su ser interior con la vibración del festival. A menudo, el ayuno es visto como una oportunidad para la introspección, para reflexionar sobre nuestros propios desafíos y cómo podemos superarlos, tal como Rama venció a Ravana.
¿Qué se puede comer durante el ayuno?
El ayuno de Navratri es flexible y varía según la región y las creencias personales. Sin embargo, en general, las personas siguen una dieta satvik, es decir, una dieta pura que excluye alimentos como la carne, el ajo y la cebolla. Durante el ayuno, la comida se mantiene simple y nutritiva, enfocada en alimentos que son fáciles de digerir y energizantes.
Entre los alimentos permitidos durante el ayuno están:
- Frutas frescas: Muchas personas prefieren mantenerse con frutas frescas como plátanos, manzanas y granadas, que brindan energía sin ser pesadas.
- Sabudana Khichdi: Uno de los platos más populares es el sabudana khichdi, una mezcla de perlas de tapioca cocidas con cacahuetes, papas y especias ligeras. Este platillo no solo es sabroso, sino que también es muy nutritivo y fácil de digerir.
- Kuttu ki puri: Esta es una especie de pan plano frito hecho de harina de trigo sarraceno, que se suele acompañar con aloo sabzi (un curry de papas especiado).
- Lassi o yogur: Las bebidas lácteas como el lassi, o simplemente el yogur, son populares porque ayudan a mantener el cuerpo fresco y son una excelente fuente de proteínas durante el ayuno.
- Makhanas (semillas de loto): Las semillas de loto fritas y condimentadas son un snack saludable que muchos disfrutan durante el ayuno.
Aunque la dieta del ayuno es simple, no por ello es menos deliciosa. Me encanta cómo la comida satvik, con su sabor suave y su carácter ligero, te deja sentir más liviano y en armonía con las celebraciones que están por venir.
¿Cómo se vive el festival Dussehra?
He tenido la suerte de vivir Dussehra en diferentes lugares de India, y te aseguro que la forma en que se celebra varía tanto como los colores de un sari. Sin embargo, hay algo que es común en todas partes: la energía es absolutamente contagiosa.
- La quema de efigies de Ravana: Si te gustan los espectáculos llenos de emoción, no te puedes perder la quema de enormes efigies de Ravana, cargadas de fuegos artificiales. Imagínate estar en medio de la multitud, ver cómo esas gigantes figuras explotan en llamas, simbolizando la victoria del bien sobre el mal. Es una sensación que te hace sentir parte de algo mucho más grande.
- Las Ramlilas: Si disfrutas del teatro, este es tu momento. Las Ramlilas, representaciones teatrales de la historia de Rama, se escenifican en toda India. Desde pequeños pueblos hasta grandes ciudades, verás actores locales recreando la batalla final con una pasión que te pone la piel de gallina. Si estás en Delhi o Varanasi, este espectáculo es algo que simplemente no puedes perderte.
- Los desfiles reales: Una de las experiencias más inolvidables es en Mysore, donde el Dussehra se celebra con un desfile digno de la realeza. Elefantes ricamente adornados, bandas de música, carrozas que cuentan historias de los dioses… Todo el ambiente es como si te transportaras a una época pasada. Es uno de esos momentos en los que piensas: «¡Estoy en un cuento en la India!»
Dussehra en los hogares hindúes
Dussehra no solo se vive en las calles, también se siente con fuerza en los hogares hindúes. Durante este festival, las familias decoran sus casas con colores vibrantes y símbolos auspiciosos, como el rangoli, hermosas figuras hechas con polvo de colores o flores, que adornan las entradas para atraer buenas energías.
El décimo día, Vijayadashami, es un momento especial para las familias, que se reúnen para realizar oraciones y ofrendas a los dioses. En muchos hogares, se realiza un ritual conocido como Ayudha Puja, en el que se bendicen los objetos de trabajo: libros, herramientas y cualquier cosa que represente la vocación de la familia. Es un acto de gratitud, un reconocimiento de que, sin la ayuda divina, no habría éxito en ninguna de nuestras labores.
Los más jóvenes también participan con entusiasmo. Las niñas suelen vestirse como la diosa Durga y son veneradas por los miembros mayores de la familia en un ritual conocido como Kanya Puja, donde se reconoce la divinidad en cada niña. Los niños, por otro lado, disfrutan de los fuegos artificiales y de la emoción de las celebraciones callejeras.
¿Dónde celebrar Dussehra en India?
India es tan vasta y diversa que cada lugar tiene su propio toque especial para Dussehra. Aquí te dejo mis favoritos, basados en mis experiencias viajeras:
- Kullu, Himachal Pradesh: Esta pequeña ciudad en las colinas cobra vida durante Dussehra. El festival aquí dura siete días, y lo que lo hace único es su tono profundamente espiritual. Las procesiones con ídolos de dioses de las aldeas cercanas se reúnen en el valle, y se siente como si los dioses mismos caminaran entre los devotos.
- Mysore, Karnataka: Si alguna vez soñaste con ser parte de una celebración real, Mysore es el lugar. El palacio de Mysore, iluminado con miles de luces, es algo que no se puede describir con palabras. Tienes que verlo con tus propios ojos. El desfile de Dussehra, con elefantes adornados y música en vivo, es una experiencia mágica.
- Varanasi, Uttar Pradesh: ¿Te imaginas ver las Ramlilas a orillas del Ganges? Las efigies de Ravana se queman con el telón de fondo del río sagrado, y todo el ambiente es pura devoción. Es imposible no sentirse conectado con la energía espiritual de la ciudad durante este festival.
Sabores que acompañan Dussehra
Dussehra no solo es un festival para los ojos y el alma, ¡también lo es para el paladar! La comida juega un papel crucial, y cada región aporta su toque especial.
- Comida satvik: Durante Navratri y Dussehra, muchas personas siguen una dieta satvik, que es pura y vegetariana, sin cebolla ni ajo. Esto le da un sabor especial a los platos como el khichdi, un reconfortante arroz con lentejas, acompañado de puris y sabzi de calabaza. Te aseguro que esta comida tiene un sabor sencillo pero lleno de significado.
- Paanaka y Kosambari: En Karnataka, el clima caluroso pide algo refrescante, como el paanaka, una bebida hecha con jugo de limón y azúcar. Además, no puede faltar el kosambari, una ensalada ligera de lentejas, perfecta para equilibrar las energías durante las largas celebraciones.
- Dulces tradicionales: Ningún festival indio está completo sin sus dulces, y Dussehra no es la excepción. Mis favoritos incluyen el barfi, hecho de leche condensada y azúcar, y las crujientes jalebis, que parecen pequeñas espirales doradas llenas de almíbar. También destacan los laddus, bolitas de harina de garbanzo y azúcar, que son un clásico en las celebraciones. Estos dulces no solo endulzan la ocasión, sino que también representan la alegría y el éxito que trae Dussehra.
En los hogares, además de los dulces, las familias suelen preparar puri (pan frito), acompañado de sabzi de calabaza o patatas. Estos platos tienen un sabor casero y lleno de cariño, perfectos para compartir después de las oraciones familiares y las celebraciones.
Dussehra: Más que una Celebración
Dussehra siempre me deja una huella profunda. Cada vez que lo celebro, me recuerda que la lucha por el bien, ya sea en historias míticas o en nuestras propias vidas, nunca termina. Es un recordatorio de que todos enfrentamos nuestras propias versiones de Ravana, pero con perseverancia, podemos superarlas.
Al final del día, Dussehra no es solo un festival de efigies en llamas o espectáculos grandiosos; también es un momento de unión, de reflexión y de gratitud en los hogares indios. Ver cómo las familias se reúnen, decoran sus hogares y comparten bendiciones me hace apreciar aún más la riqueza espiritual que la India aporta al mundo.
Si alguna vez te encuentras en India durante este festival, no te limites a ser un observador. Sumérgete en las celebraciones, vive la historia, disfruta de los sabores, y deja que el espíritu de Dussehra te inspire. Este es el tipo de festival que te transforma, no solo por lo que ves, sino por lo que sientes.
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